Gafas de sol

Las gafas de sol reducen la exposición en superficies que reflejan la luz solar, tales como la nieve y el agua. 

Los rayos ultravioleta son reflejados por la arena, las baldosas, el agua, la nieve y los edificios. Es importante tomar todas las medidas necesarias para protegerse del sol, incluso cuando se está a la sombra. 

Las gafas de sol deberían bloquear el 100% de la radiación ultravioleta A y B. Las lentes polarizadas separan la luz útil de la luz dañina que perjudica la visión, logrando el máximo aprovechamiento de la luminosidad tanto en las zonas expuestas al sol (en las que eliminan los reflejos y rayos deslumbrantes) como en las de penumbra (por ejemplo, en los túneles eliminan la ceguera transitoria debida al cambio de luminosidad). 

De este modo, se convierten en un elemento de seguridad más en la conducción, muy útil tanto para los profesionales que pasan muchas horas al volante (reducen sustancialmente la fatiga de ojos), como para los usuarios normales.